21 noviembre, 2006

Sobre... nostalgia ochentera


Hablemos sobre...
Los románticos 80's

Acá estamos luego de millones de años, y prometo que de ahora en delante trataré de escribir más a menudo.

Bueno, ahora estoy un poco nostálgica por la animación de antaño. Comentaba hace poco con mi hermano acerca de lo lejos que se ven los 80's y el anime ochentero, y que actualmente hace falta recuperar ese espíritu ochentero.

Y a qué rayos me refiero con esto??? Actualmente las series de anime tienen mejor calidad técnica y todo eso, pero las historias han dado cierto giro respecto al contenido y los personajes. Actualmente las series tienden a ser más fatalistas, llenas de visiones de desesperanza, llenas de deseo de muerte y destrucción, y que pinta a una humanidad corrupta cuyo único camino es la autodestrucción. Esas tramas están bien en ciertas dosis, pero creo que actualmente hace falta el resurgimiento de esa clase de historias y de personajes que plagaron los 80's: el romanticismo del anime.

ROMANTICISMO no quiere decir precisamente historia de amor, sino ese sentimiento épico-heróico-rebelde que colmaban a las series ochenteras.
Extraño esas historias llenas de fatalidad y amenaza hacia la humanidad, sí, pero donde está la figura cental de la esperanza la cual se deposita en un HÉROE. Actualmente hay pocos héroes como tal, y existe cierta nostalgia por el héroe o heroína joven, rebelde, inexperto, que madura conforme avanza la trama, con un corazón puro y lleno de deseos de libertad, y por supuesto, una total carencia de presupuesto para comprarse un buen peine y un gel.

Y es que las series ochenteras se orientaban más hacia lo épico, y es por eso que serán recordadas por mucho más tiempo que muchas series con éxito pasajero actuales. Y basta con oír los openings de los 80's, llenas de fanfarria y trompetas, y cierto tinte heróico muy difícil de describir. Ya no se ve eso, y es triste.

Bueno, mi propuesta sería rescatar el sentimiento romántico del anime, retomar el casi olvidado concepto de "héroe" y orientarnos más por la esperanza y no por la fatalidad, tomar el libido y no el destrudo (no se dice destrado, se dice DESTRUDO), ya que en estos tiempos hace falta, y mucha, resaltar valores que hagan de todos nosotros y nosotras unas mejores personas.

Adiós!!!